Reforma Móvil
Los cinco detenidos hasta ahora por el ataque al Casino Royale del pasado jueves, en el que murieron 52 personas, declararon a las autoridades que pretendían amedrentar al negocio, pero que el incendio que causaron se les salió de control.
Luis Carlos Carrazco, alias "El Chihuas", de 25 años; Javier Alonso Martínez, "El Javo", de 37 años, y Jonathan Jahir Reyna Gutiérrez, de 18 años, son tres de los detenidos que la Procuraduría estatal informó ayer haber capturado como responsables del atentado.
Con ellos cayeron Juan Ángel Leal, "El Casillas" o "El Cash", de 20 años, y Julio Tadeo Berrones, "El Julio Rayas", de 28.
Las autoridades dijeron que los inculpados, a quienes presentarán hoy, confesaron su participación en el atentado y que su captura se logró gracias a la toma de huellas dactilares y la revisión de videos que permitieron identificarlos.
Una fuente estatal reveló que, en su confesión, los sospechosos indicaron que el atentado habría sido por un "cobro de piso" para un grupo de Los Zetas, pero argumentaron que no querían asesinar a los clientes.
"Ellos iban a dar un escarmiento al del casino y se les pasó la mano", señaló una fuente del Gobierno del Estado citando a los detenidos. "No querían matar gente, pero no calcularon lo que hicieron, pues fue mucha gasolina la que usaron".
"En los videos se ve que le dicen a la gente que se salga, pero al verlos armados muchos clientes se fueron al fondo del casino y no a la salida", añadió.
El vocero estatal de Seguridad, Jorge Domene, reveló que hay otras cuatro personas que están siendo buscadas, incluyendo el autor intelectual del atentado, quien ya fue identificado.
Por separado, en una entrevista para Radio Fórmula, Domene reveló que los detenidos afirmaron haber sido regañados por sus sus jefes, luego de confirmarse que el ataque provocó la muerte de 52 personas.
La idea original del ataque, agregó, era desalojar el lugar y posteriormente quemar el centro de apuestas.
"Se sale de control (el atentado), es expresado por ellos mismos (los presuntos delincuentes)", indicó. "Inclusive después narran de que fueron regañados por parte de sus 'jefes' por el acto que se comete y la dimensión que esto toma".
En rueda de prensa, el Gobernador Rodrigo Medina detalló que los sospechosos confesaron pertenecer al grupo de los Zetas y también admitieron su participación en los hechos.
En las instalaciones de la Procuraduría, Medina presentó las fotos de los cinco hombres y también mostró un video donde aparecen los vehículos utilizados en la agresión.
Se observa en la grabación cuando llega una camioneta pick up azul a una gasolinería en la Colonia Valle Verde, en Monterrey, a unos 8 kilómetros del casino, ubicado la Avenida San Jerónimo.
Los delincuentes cargaron varios recipientes con combustible, minutos antes de perpetrar el atentado. También aparece una camioneta gris Equinox.
De acuerdo con Medina, todos los detenidos participaron en el ataque ya sea como autores intelectuales, coadyuvantes, vigilantes, autores materiales, y conductores de los vehículos.
Provocan incendio con $416
Provocar el incendio en el Casino Royale y acabar con la vida de 52 personas tuvo un costo de no más de 416 pesos para los sicarios que perpetraron el ataque.
De acuerdo con los videos mostrados por la Procuraduría de Justicia del Estado, los delincuentes llenaron con gasolina 4 contenedores de 10 litros cada uno para después rociarlos en el interior de la casa de apuestas.
La gasolina Magna tiene un costo de 9.40 pesos por litro, lo que supone un gasto de 376 pesos en 40 litros del combustible, mientras que la Premium tiene un precio de 10.42 pesos por litro, que equivale a un total de 416 pesos.
El jueves, un grupo armado irrumpió en el Casino Royale, ubicado en la Avenida San Jerónimo, y tras amagar a clientes y empleados derramó el combustible para después prender fuego en el lugar, donde presuntamente había unos 200 clientes.
El atentado se convirtió en el peor ataque del crimen organizado contra la población civil en México con un saldo de 52 personas muertas, incluyendo una mujer embarazada, además de 10 personas lesionadas, principalmente mujeres.
Enviado por Proyectocinco.com a través de BlackBerry de movistar
Los cinco detenidos hasta ahora por el ataque al Casino Royale del pasado jueves, en el que murieron 52 personas, declararon a las autoridades que pretendían amedrentar al negocio, pero que el incendio que causaron se les salió de control.
Luis Carlos Carrazco, alias "El Chihuas", de 25 años; Javier Alonso Martínez, "El Javo", de 37 años, y Jonathan Jahir Reyna Gutiérrez, de 18 años, son tres de los detenidos que la Procuraduría estatal informó ayer haber capturado como responsables del atentado.
Con ellos cayeron Juan Ángel Leal, "El Casillas" o "El Cash", de 20 años, y Julio Tadeo Berrones, "El Julio Rayas", de 28.
Las autoridades dijeron que los inculpados, a quienes presentarán hoy, confesaron su participación en el atentado y que su captura se logró gracias a la toma de huellas dactilares y la revisión de videos que permitieron identificarlos.
Una fuente estatal reveló que, en su confesión, los sospechosos indicaron que el atentado habría sido por un "cobro de piso" para un grupo de Los Zetas, pero argumentaron que no querían asesinar a los clientes.
"Ellos iban a dar un escarmiento al del casino y se les pasó la mano", señaló una fuente del Gobierno del Estado citando a los detenidos. "No querían matar gente, pero no calcularon lo que hicieron, pues fue mucha gasolina la que usaron".
"En los videos se ve que le dicen a la gente que se salga, pero al verlos armados muchos clientes se fueron al fondo del casino y no a la salida", añadió.
El vocero estatal de Seguridad, Jorge Domene, reveló que hay otras cuatro personas que están siendo buscadas, incluyendo el autor intelectual del atentado, quien ya fue identificado.
Por separado, en una entrevista para Radio Fórmula, Domene reveló que los detenidos afirmaron haber sido regañados por sus sus jefes, luego de confirmarse que el ataque provocó la muerte de 52 personas.
La idea original del ataque, agregó, era desalojar el lugar y posteriormente quemar el centro de apuestas.
"Se sale de control (el atentado), es expresado por ellos mismos (los presuntos delincuentes)", indicó. "Inclusive después narran de que fueron regañados por parte de sus 'jefes' por el acto que se comete y la dimensión que esto toma".
En rueda de prensa, el Gobernador Rodrigo Medina detalló que los sospechosos confesaron pertenecer al grupo de los Zetas y también admitieron su participación en los hechos.
En las instalaciones de la Procuraduría, Medina presentó las fotos de los cinco hombres y también mostró un video donde aparecen los vehículos utilizados en la agresión.
Se observa en la grabación cuando llega una camioneta pick up azul a una gasolinería en la Colonia Valle Verde, en Monterrey, a unos 8 kilómetros del casino, ubicado la Avenida San Jerónimo.
Los delincuentes cargaron varios recipientes con combustible, minutos antes de perpetrar el atentado. También aparece una camioneta gris Equinox.
De acuerdo con Medina, todos los detenidos participaron en el ataque ya sea como autores intelectuales, coadyuvantes, vigilantes, autores materiales, y conductores de los vehículos.
Provocan incendio con $416
Provocar el incendio en el Casino Royale y acabar con la vida de 52 personas tuvo un costo de no más de 416 pesos para los sicarios que perpetraron el ataque.
De acuerdo con los videos mostrados por la Procuraduría de Justicia del Estado, los delincuentes llenaron con gasolina 4 contenedores de 10 litros cada uno para después rociarlos en el interior de la casa de apuestas.
La gasolina Magna tiene un costo de 9.40 pesos por litro, lo que supone un gasto de 376 pesos en 40 litros del combustible, mientras que la Premium tiene un precio de 10.42 pesos por litro, que equivale a un total de 416 pesos.
El jueves, un grupo armado irrumpió en el Casino Royale, ubicado en la Avenida San Jerónimo, y tras amagar a clientes y empleados derramó el combustible para después prender fuego en el lugar, donde presuntamente había unos 200 clientes.
El atentado se convirtió en el peor ataque del crimen organizado contra la población civil en México con un saldo de 52 personas muertas, incluyendo una mujer embarazada, además de 10 personas lesionadas, principalmente mujeres.
Enviado por Proyectocinco.com a través de BlackBerry de movistar
