La mujer que era paralítica fue encontrada muerta en su domicilio de Balcones del Sur
La Procuraduría General de Justicia (PGJ) ejercitó acción penal en contra de Serafín Rodríguez Romano como probable responsable del homicidio de su concubina ocurrido el pasado lunes en la colonia Balcones del Sur. Este hombre otrora formó parte del Ejército Mexicano, posteriormente fue custodio, y actualmente laboraba como vigilante.
Con la mujer muerta y su esposo tras las rejas – probablemente por el resto de su vida – así terminó la historia de un “amor salvaje”. La familia de la finada en repetida ocasiones le aconsejó abandonar a su violento esposo, sin embargo ella se negaba porque decía “amarlo encarecidamente”. La misma familia de la hoy occisa señala, “él también la amaba mucho”, pero la golpeaba a la menor oportunidad.
Cabe recordar que Rivera Noriega era paralítica, padecía artritis reumatoide, y estaba enferma de diabetes desde hace varios años. Esto no causaba piedad en Rodríguez Romano, quien era alcohólico igual que la hoy occisa. Y así bajo los influjos del alcohol, arremetía a golpes contra su pareja.
El 7 de enero del año en curso se tuvo conocimiento del deceso de Ana María Rivera Noriega, de 59 años de edad, quien fue hallada golpeada y sin vida en su habitación. De acuerdo a la necropsia, falleció a consecuencia de traumatismo craneoencefálico lo cual quedó asentado en la averiguación previa 05/2013 de la agencia del Ministerio Público especializada en investigación de homicidios.
En el lugar del crimen se hallaron diversos indicios sobre la presunta responsabilidad de Serafín Rodríguez Romano en el hecho delictivo, entre ellos el hecho de que al llegar la Policía Municipal y familiares de la víctima al inmueble, dicho sujeto les negó en un principio el acceso pero posteriormente, al ser cuestionado en torno a lo sucedido, se tornó agresivo e intentó huir de la casa sin motivo aparente.
Por lo anterior, Rodríguez Romano, de 73 años de edad, fue presentado al Ministerio Público para que se desahogaran las diligencias correspondientes; sin embargo horas más tarde se le decretó detención al encontrarse elementos que permiten acreditar su presunta responsabilidad en el homicidio de su esposa.
De acuerdo con las investigaciones realizadas por la representación social, con apoyo de la Policía Ministerial y personal de Servicios Periciales, entre el 1 y 2 de enero del año en curso el presunto homicida llegó a su domicilio en estado de ebriedad y discutió con la hoy finada, pero no conforme con agredirla verbalmente empezó a golpearla en la cabeza y el rostro hasta que la privó de la vida.
Con base en las pruebas reunidas por la Procuraduría de Justicia, Serafín Rodríguez Romano será puesto a disposición del Juez penal correspondiente en el Centro de Reinserción Social de San Miguel.
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