Martín Hernández/La Jornada de Oriente
Funcionarios de la dirección de Comunicación Social del ayuntamiento de Puebla, que preside José Antonio Gali Fayad, confirmaron la detención por parte d la policía municipal del fotoperiodista, Ángel Flores, de la agencia Es Imagen.
José Castañares, director de la agencia, dijo que las autoridades le dieron a conocer que Flores fue aprendido y llevado a la central policiaca de San Felipe Hueyotlipan, debido a que los uniformados le pidieron que no tomara fotos de un operativo que la policía realizaba en la vía publica sobre una manifestación en las inmediaciones del edificio Carolino. Según la versión oficial el fotoperiodista se negó a dejar de hacer su trabajo y además insulto a los gendarmes.
Las fuentes oficiales indicaron que Ángel Flores ya había salido libre y que se le devolvió su equipo y teléfono celular, con lo cual se intuye que fue incomunicado. Hasta el momento el periodista no se ha reportado y su celular responde como apagado.
Fotoperiodista relata su detención
El fotoperiodista Ángel Flores, relató como sucedió la arbitrariedad de su detención por parte de policías municipales.
Contó que se percató de que en las inmediaciones de la Plaza de la Democracia, policías municipales efectuaban uno de los llamados “operativos facha”, por los cuales, uniformados detienen a personas que por su vestimenta les parecen “sospechosas”. En este tipo de acciones los policías catean a los ciudadanos, regularmente jóvenes y les esculcan sus mochilas y demás pertenencias.
Los gendarmes le impidieron a Flores tomar sus placas e hicieron lo mismo con otros ciudadanos que hacían fotografías. El fotoperiodista se identificó y reclamo que tenía derecho constitucional a ejercer su trabajo. Como respuesta los uniformados lo sometieron, lo despojaron de su equipo y demás pertenencias, incluido su teléfono celular. Luego lo esposaron y se lo llevaron a la central policiaca de Rancho Colorado.
Cuando llegó al inmueble oficial ya había personal de la dirección de Comunicación Social del ayuntamiento, abogando porque lo liberaran. Tras media hora de gestiones, el informador fue puesto en libertad y quiso tramitar una queja ante la contraloría interna de la dependencia, pero le informaron que no podía hacerlo porque no había registro de su detención.
Posteriormente el personal de la dirección de Comunicación Social de la comuna le ofreció disculpas y también se comunico con los directivos de Es Imagen para hacer lo propio.