Por Odilón Larios/Cinco radio
Tendido y sin vida a un costado de la autopista Puebla-Orizaba, hallaron el cuerpo de un hombre aparentemente atropellado, el cual tenía múltiples fracturas en el cuerpo. Fue encontrado a la altura del kilómetro 168+200 de la citada carretera.
Se ignora el momento en que sufrió el accidente, así como la mecánica de los hechos, ya que del percance no hubo testigos.
Hasta horas después de su deceso, las autoridades recibieron varias llamadas que alertaban de la presencia del cuerpo, llamadas hechas por los automovilistas que avistaron el cadáver.
Al llegar personal de la Policía Federal Preventiva sección carreteras, corroboraron la presencia del cuerpo, y dieron parte a las autoridades ministeriales.
Acudió a realizar las diligencias del levantamiento del cadáver el agente del Ministerio Público de Tepeaca.
El finado hasta el cierre de esta edición permanece en calidad de desconocido, señalado con el número 10, en el anfiteatro de la Procuraduría General de Justicia del Estado.
La necropsia de ley aplicada al cadáver, según se asentó en la averiguación previa 801/2011 de Tepeaca, arrojó como causa del deceso fractura craneana, tórax inestable y estallamiento de hígado. Entre sus pertenencias no se encontraron credenciales que permitieran su identificación.
Tendido y sin vida a un costado de la autopista Puebla-Orizaba, hallaron el cuerpo de un hombre aparentemente atropellado, el cual tenía múltiples fracturas en el cuerpo. Fue encontrado a la altura del kilómetro 168+200 de la citada carretera.
Se ignora el momento en que sufrió el accidente, así como la mecánica de los hechos, ya que del percance no hubo testigos.
Hasta horas después de su deceso, las autoridades recibieron varias llamadas que alertaban de la presencia del cuerpo, llamadas hechas por los automovilistas que avistaron el cadáver.
Al llegar personal de la Policía Federal Preventiva sección carreteras, corroboraron la presencia del cuerpo, y dieron parte a las autoridades ministeriales.
Acudió a realizar las diligencias del levantamiento del cadáver el agente del Ministerio Público de Tepeaca.
El finado hasta el cierre de esta edición permanece en calidad de desconocido, señalado con el número 10, en el anfiteatro de la Procuraduría General de Justicia del Estado.
La necropsia de ley aplicada al cadáver, según se asentó en la averiguación previa 801/2011 de Tepeaca, arrojó como causa del deceso fractura craneana, tórax inestable y estallamiento de hígado. Entre sus pertenencias no se encontraron credenciales que permitieran su identificación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario