*Aseguran que las niñas ya tienen más participación en las agresiones
Carolina Gil/TV3 Noticias
Puebla, Pue. Cada vez a más temprana edad se presentan casos de bullying, especialistas refieren que hace 5 años era un comportamiento de jóvenes entre 16 y 18 años, actualmente niños de 10 comienzan con agresiones en las aulas.
“Es cierto que el bullying siempre ha existido pero es cierto que hoy tienen más armas como el ciberbullying, los chicos han encontrado nuevas formas de acosar e intervenir”, afirmó Luz María Padilla Psicóloga Educativa.
Las mujeres ya toman parte de este fenómeno y han comenzado a mostrar violencia verbal y física contra sus compañeros: “Antes las niñas eran testigos que por temor o inseguridad, incluso se ve un grado de crueldad mucho mayor en las chicas, una competitividad más fuerte que entre hombres”, añadió Padilla.
Para detectar a un niño que sufre bullying basta con observar su sueño, pues quienes son agredidos comúnmente presentan alteraciones al descansar por la noche: “Y es un círculo vicioso porque no duermen bien, vienen a la escuela, cansados y más propensos a la agresión”, indicó la especialista.
De cada 10 casos de trastornos del sueño en menores que trata Luz María Padilla, por lo menos 6 está relacionados con bullying, el resto corresponden a violencia en casa.
Puebla, Pue. Cada vez a más temprana edad se presentan casos de bullying, especialistas refieren que hace 5 años era un comportamiento de jóvenes entre 16 y 18 años, actualmente niños de 10 comienzan con agresiones en las aulas.
“Es cierto que el bullying siempre ha existido pero es cierto que hoy tienen más armas como el ciberbullying, los chicos han encontrado nuevas formas de acosar e intervenir”, afirmó Luz María Padilla Psicóloga Educativa.
Las mujeres ya toman parte de este fenómeno y han comenzado a mostrar violencia verbal y física contra sus compañeros: “Antes las niñas eran testigos que por temor o inseguridad, incluso se ve un grado de crueldad mucho mayor en las chicas, una competitividad más fuerte que entre hombres”, añadió Padilla.
Para detectar a un niño que sufre bullying basta con observar su sueño, pues quienes son agredidos comúnmente presentan alteraciones al descansar por la noche: “Y es un círculo vicioso porque no duermen bien, vienen a la escuela, cansados y más propensos a la agresión”, indicó la especialista.
De cada 10 casos de trastornos del sueño en menores que trata Luz María Padilla, por lo menos 6 está relacionados con bullying, el resto corresponden a violencia en casa.
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