por ODILÓN LARIOS
Enredado por las cuerdas con las que ató a un equino, pereció un ancianito de 82 años de edad, mientras se encontraba en sus campos de cultivo. El hombre tropezó con la reata y al caer de lleno se golpeó la cabeza con una piedra. Pese a ser trasladado con vida a un nosocomio en la ciudad capital del estado, días después de estar internado expiró su último aliento.
El hombre de ocupación campesino en vida llevó el nombre de Álvaro Carmona Huerta, que contaba con 82 años de edad. Fue originario y vecino de la población de San Bernardino Lagunas, perteneciente al municipio Vicente Guerrero, en el Distrito Judicial de Tehuacán.
Todo ocurrió en días pasados cuando el ahora occiso, acudió como de costumbre a laborar en sus terrenos de cultivo montando su caballo, que le ayudaba a reducir los esfuerzos. Como siempre, ató a la bestia a unos matorrales para que se alimentara mientras él revisaba sus sembradíos.
Mientras el hombre caminaba, ignoró la presencia de la larga soga del caballo la cual había quedado tensada debido a que la bestia se alejó al máximo. Esto ocasionó que se convirtiera en una trampa involuntaria. El hombre tropezó y sufrió lesiones en la caída, que por su avanzada edad resultaron mortales.
El hombre fue encontrado por sus familiares, que lo trasladaron a un nosocomio cercano a esa comunidad, donde debido a la gravedad de las lesiones ordenaron su traslado al Hospital General del Sur en la ciudad de Puebla. Lugar en donde finalmente pereció a causa de las lesiones que sufrió en el accidente campestre.
Hasta el nosocomio antes mencionado acudieron las autoridades de la Procuraduría General de Justicia del Estado, quienes llevaron a cabo las diligencias del levantamiento de cadáver asentando los pormenores del accidente en la constancia de hechos 463/2012/AEHOM.
El hombre de ocupación campesino en vida llevó el nombre de Álvaro Carmona Huerta, que contaba con 82 años de edad. Fue originario y vecino de la población de San Bernardino Lagunas, perteneciente al municipio Vicente Guerrero, en el Distrito Judicial de Tehuacán.
Todo ocurrió en días pasados cuando el ahora occiso, acudió como de costumbre a laborar en sus terrenos de cultivo montando su caballo, que le ayudaba a reducir los esfuerzos. Como siempre, ató a la bestia a unos matorrales para que se alimentara mientras él revisaba sus sembradíos.
Mientras el hombre caminaba, ignoró la presencia de la larga soga del caballo la cual había quedado tensada debido a que la bestia se alejó al máximo. Esto ocasionó que se convirtiera en una trampa involuntaria. El hombre tropezó y sufrió lesiones en la caída, que por su avanzada edad resultaron mortales.
El hombre fue encontrado por sus familiares, que lo trasladaron a un nosocomio cercano a esa comunidad, donde debido a la gravedad de las lesiones ordenaron su traslado al Hospital General del Sur en la ciudad de Puebla. Lugar en donde finalmente pereció a causa de las lesiones que sufrió en el accidente campestre.
Hasta el nosocomio antes mencionado acudieron las autoridades de la Procuraduría General de Justicia del Estado, quienes llevaron a cabo las diligencias del levantamiento de cadáver asentando los pormenores del accidente en la constancia de hechos 463/2012/AEHOM.
No hay comentarios:
Publicar un comentario